Nos encontramos, en lo que a construcción se refiere, en la posición más exigente; entre el proyecto arquitectónico y los sueños de los clientes. Aunque también, la más satisfactoria: la de materializar los proyectos de la gente despierta que quieren lo mejor para ellas y para el medioambiente.
Nos sentimos satisfechos con nuestro camino
- Hemos rehabilitado y construido decenas de casas eficientes y ecológicas para otros y para nosotros mismos, creando un diálogo entre el entorno (la vegetación, la ubicación, la orientación, …), el edificio y el cliente.
- Hemos apostado, cuando todavía no estaban de moda, por materiales sostenibles y biodegradables ante otras soluciones más agresivas para el hombre y el medioambiente.
- Realizamos estructuras de madera sin, o casi sin, hormigón y hierro.
- Envolvemos los edificios con materiales como el algodón, la celulosa, los paneles de fibra de madera (evidentemente sin formaldehído), la lana de roca, etc., para aislarlos del frío y del calor, aplicando, también, los principios de eficiencia energética y geobiología.
Presente continuo
Hemos crecido y nuestra vitamina es el inconformismo con una buena dosis de curiosidad. Consideramos los edificios como algo vivo. Ellos ven crecer, evolucionar, y envejecer a sus habitantes. Son los testigos de experiencias pintadas de risas y alguna lágrima, nos acogen protegiéndonos del frío o del exceso de calor, nos protegen cuando enfermamos y luego sanamos.
Para la mejor proyección del hogar, a la distribución más adecuada, a la construcción más cuidadosa; combinamos un espíritu práctico e intuitivo con una visión más armoniosa de los lugares.
Estamos abiertos. Nuestro conocimiento se amplía, las manos se vuelven cada vez más hábiles, los retos, ya se sabe, no solo son a nivel profesional.
Queremos compartir nuestra experiencia y queremos expandir todo nuestro conocimiento para participar en la construcción de edificios de máxima calidad, teniendo en cuenta, a la vez, el bolsillo del cliente.